Francisco Catena: Nacido en la bulliciosa Capital Federal, sus raíces se entrelazan con las tierras mendocinas, donde su padre, oriundo de Rivadavia, se encontró con el amor de una cordobesa. Aunque su origen geográfico era diverso, la vida de Francisco estuvo inextricablemente vinculada a Mendoza. Los veranos de su infancia se dividían entre el campo ganadero en Ñacuñan y los viñedos en Rivadavia, donde su familia paterna, descendientes directos de Italia, escribieron con tinta de uva gran parte de la historia del vino argentino.
Las Raíces en la Tierra y el Vínculo Familiar: Recuerdos de su niñez se entrelazan con la figura de su abuelo, Alfredo V.A, quien dedicó toda su vida a los viñedos y elaboraba vinos para el consumo familiar. Después de cada cosecha, la tradición familiar los llevaba a mezclar racimos de un parral cuidadosamente seleccionado, donde Francisco y sus hermanos participaban activamente en el proceso, incluso pisando la uva junto a su abuelo.
El Nacimiento de Fran-C Wines: En 2013, Francisco dio un paso audaz al iniciar su propio proyecto vinícola bajo el evocador nombre de The Fran-C Wines. Una fusión de sus dos grandes pasiones: el vino y la pesca con mosca. Inspirado por su padre Cesar, quien inculcó estas aficiones desde su más tierna infancia junto a su hermano Nicolás, Francisco lleva el legado familiar hacia nuevas alturas.
Vinos con Identidad y Pasión: Los vinos de Francisco Catena llevan nombres que son oda a su amor por la pesca deportiva. Just Fly fish y Gran pesca son algunos ejemplos, mientras que II instintos rinde homenaje al instinto tanto del pez como del pescador. Además, rescata la marca La Misión, concebida por su padre hace años, dándole una moderna estética acorde al mercado actual.
Terroirs que Hablan: Los vinos de Fran-C provienen de tres terroirs distintos: La Consulta, Maipú y, por supuesto, Rivadavia, el lugar de origen de la familia. La icónica Bonarda del Este, parte fundamental de los tintos de La Misión, destaca como un tributo a la tierra que los vio florecer.
Vida Familiar y Futuro en Crecimiento: A sus 40 años, Francisco, casado con Florencia y padre de Inés y Juana, tiene la visión de transmitir a sus hijas el amor por el vino y la pesca con mosca. Un legado que espera vean florecer y continúen en las generaciones venideras, tejiendo así una historia que perdure en cada botella de Fran-C Wines.
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